Si antes de calzarte una chancla, quieres saber lo que lo que opinarán las mujeres al verte con este calzado, sólo tienes que bucear un poco por internet y en un "plis plas" sabrás que ellas odian ver tus pies al aire. Ya las puedes combinar como quieras, las mujeres tienen claro que los pies masculinos no son muy agradables para la vista, e incluso algunas féminas señalan la torpeza varonil para andar con las chanclas, pero nuestro objetivo no es crear una guerra de sexos en este tema.
Si eres de los que siempre han apostado por la chancla o la has descubierto ahora y te parece el calzado de tu vida, sobre todo para esta época, debes saber que hay tantos tipos de chanclas como hombres existen.
Si piensas que la chancla de toda la vida es la chancla de dedo, te equivocas; la chancla original es la que tiene una sola tira de un lado a otro del pie, de plástico y de los colores marineros azul y blanco o rojo y blanco. Original también es la combinación de esta chancla con calcetines en algunos hombres (¡incluso blancos!), pero nos referimos a original en cuanto a sus principios de existencia, ahora es la distinción básica de paleto o guiri. Este modelo es ideal para bajar a la playa o piscina, ¡no más! (Y recuerda: sin calcetines).
De ese modelo, la chancla ha evolucionado mucho: la de dedo es la más extendida y dentro de esta variante, hay numerosos estilos: deportivas, playeras, piscineras, hippies, de cuero, tirando al estilo de los mocasines… un sinfín de modelos que, dependiendo de tus gustos, puedes incorporar a tu zapatero.
Las más extendidas son las ‘havaianas’. Dícese de la chancla con suela de arroz texturizada, inspirada en las sandalias japonesas tradicionales. Con estampados, lisas o con múltiples combinación de colores y temas, las havaianas son el recurso de muchos hombres para estar cómodos tanto en la playa o piscina como en una terraza durante el día, y la verdad es que no es una mala opción, siempre y cuando se combinen con un bañador o bermudas de estilo deportivo, nunca con pantalones vaqueros.
Y es que si quieres tener tus pies frescos durante la noche y además llevar pantalón largo (a poder ser de tela fresca y suelta), existen chanclas más “estilosas”, tirando a sandalias, que pueden darte un look veraniego y chic, sin rozar lo hortera. Atiende a estas sandalias que te proponemos, donde la tira del dedo no está tan presente, e incluso existen modelos muy originales que se atan al tobillo, ¿con cuál te atreves?